viernes, 7 de agosto de 2009

Sweet dreams... bad dreams (2da. parte)


A aquella, bella desconocida, Criatura del Sueño, que me inspiró:
Haz de tu vida un sueño, y de tu sueño una realidad
Saint-Exupèry

Los sueños atormentan y fascinan a los hombres abocados a las contradicciones desde la noche de los tiempos. Divinizados primero, durante siglos, considerados en la Edad Media más bien como una emanación de Satanás y de nuestros demonios interiores, los sueños están formados con todas las virtudes para algunos, pero cargados de pecado para casi todo el mundo, porque expresan nuestras vicisitudes escondidas. ¿Son la emanación de un mundo sutil, un viaje a otro universo, o una simple reminiscencia de nuestro pasado, imagen deformada, pálido reflejo de los fantasmas de nuestra vida cotidiana?
¿Qué son los sueños? Una canción de Maurie-Paule Belle expresa esa dualidad: “es el momento en el que el sabio y el loco que están dentro de nosotros se cuentan sus secretos”.
En una oscura época de la historia ,1200 a 1560 en Francia y hasta el 1800 en España, era extremadamente peligroso contar los sueños o incluso soñar “demasiado fuerte” porque los jueces de la Santa Inquisición se servían de su manual Mulleus Maleficarum para interpretarlos: “si alguien pronuncia palabras heréticas durante su sueño, los inquisidores lo tendrán en cuanta cuando examine la vida privada del sospechoso, porque lo que preocupa a alguien durante el día, vuelve a veces, en sueños, durante la noche”… de allí a la hoguera, un solo paso…
El siglo 17, llamado el Siglo de la Luces, empujó más los sueños hacia las tinieblas exteriores. Descartes, entre otros, atribuyó muy poco valor a las imágenes de los sueños: “porque sólo podían estar inspiradas por demonios menores”. Irónicamente él mismo confesó luego, que en un sueño del 10 de noviembre de 1649, concibió su famoso Discurso del Método.
El siglo 18 y su Revolución Francesa, contribuyó más a hundir en el oscurantismo a los sueños, deificando a la famosa RAZON, cuya estatua estaba en Nôtre-Dame.
En el siglo 19 interesarse por los sueños, estaba considerado como brujería, y el clandestino oficio de “interprete de sueños” estaba considerado maldito.
Algunas citas:
“Los sueños excitan la espera de los tontos, es como querer atrapar una sombra y alcanzar el viento” (Eclesiastés, 2 siglos a.C)
“Los sueños son intermediarios que crea la imaginación fantasiosa” (Dryden 1631-1700)
“No deberían existir tales extravagancias nocturnas” (Kant 1724-1804)
“La atmósfera onírica es un reflejo de la jornada, en la que predominan los momentos irritantes y desagradables” (Hoche 1768-1797)
“El sueño es el producto del pensamiento errante sin objetivo, ni dirección” (Delage 1854-1920)
Al fin, en el año 1900 Die Traumdeutung (La interpretación de los Sueños) una de las mas famosas obras Sigmund Freud, postula la vía regia hacia el inconsciente cambiando para siempre “la suerte” de los sueños.
No obstante, ya existía un terreno sembrado por numerosos hombres de letras, artistas y filósofos. Algunas de esas obras nos llegan de la mano de Shakespeare, quien comenzó a revalorizar el poder de los sueños a través de su literatura y su teatro. También La Fontaine evoca y describe sueños memorables en sus fábulas y su teatro. Pero fue durante el siglo 19, al triunfar el Romanticismo (nada más gótico), cuando los sueños iniciaron “su rebelión”
La literatura romántica corresponde a la explosión del “alma ahogada” y excesivamente sometida a la dictadura de la razón, como sucede en cada uno de nosotros en condiciones así.
Por otro lado, son los poetas como León With: “la poesía nació del sueño”; Pierre Emanuel: “poesía es soñar despierto”; Víctor Hugo: “la vida es una página oscuramente plegada que el hombre lee cuando muere y descifra durmiendo”… entre otros, quienes inmortalizaron la palabra sueños.
Desde otro ángulo, entre tanta maraña de pensamientos influyentes en la cultura y en la ciencia, la figura de Carl Gustav Jung con su obra “Psicología de los sueños” (1928) y luego en obras mayores, revela que los sueños son un hecho: “una representación espontánea, la más sincera y más real del conjunto del inconsciente y del alma”…
Una nota gótica la trae la misma Iglesia, cuando intentó retener, muy atrás en su historia, el conocimiento de la diferencia entre sueños verdaderos y “sueños falsos”, que sólo podían venir de Satán y se debía huir de ellos, sobre todo el soñador.
En algunas civilizaciones actuales, sólo los magos y los brujos poseen ese saber sagrado, que se transmite tras rigurosos ritos de iniciación. En la nuestra, los amateurs iluminados, psicoanalistas, investigadores, ocultistas, y otros “coleccionistas de sueños” perpetúan la tradición de los iniciados.
En la liturgia gótica: “los sueños son una insurrección que en cada amanecer planta en el corazón del mundo el deseo regenerado”...

Ahora viene la noche.
Si tú pudieras verme
por los senderos del aire..

Federico García Lorca (Agua durmiente)

7 comentarios:

  1. Este blog es una cachetada dada en el medio de la mediocridad reinante. No se quien sos GothicSue, pero me gusta tu atrevimiento y la forma que tenés de decir las cosas. Decime, si querés, cómo puedo entrevistarte. Te mando mail al del perfil. Gracias.

    ResponderEliminar
  2. Hola Sue:
    Recien hoy pude leer tu blog, me parece muy interesante!!!!!
    Besos, amor y luz

    ResponderEliminar
  3. Hola Su: Acabo de ver tu blog, te felicito. Me agrada tu manera, no esperaba otra cosa, te lo habia anticipado. besos.Miguel

    ResponderEliminar
  4. Dulce Su, sin los sueños que sería de la vida, si no nos podemos dar el lujo de soñar, ¿cómo soñaría con la luz de tu rostro iluminando la oscura noche?. Como podríamos tener la esperanza del renacer, dale vida a tus sueños que alimentan el alma. No los dejes morir en el hastío, vuela, deja que el viento acaricie tu rostro y que las estrellas te acepten como tu par, vive esos momentos con los ojos abiertos, los miedos dormidos y los sueños despiertos

    ResponderEliminar
  5. Gracias Jorge (Colo). Que bello comentario! Tendrías que escribir más seguido, y enviar tus obras a mi blog. Sería un honor.
    Te mando un gran cariño!

    ResponderEliminar
  6. El Conde, que adecuado su nick name para éste blog!!! Le agradezco sus palabras. Como le dije a todos, hoy me estoy poniendo al día con las respuestas. Recibi su mail, y respondí en consecuencia. Espero verlo más seguido por mi blog.
    Cariños

    ResponderEliminar
  7. Miguel, muy dulce tu comentario. Gracias. Espero seguir leyéndolos (perdón por la demora al responder).
    Un beso.

    ResponderEliminar

Gracias caminante...llévate una rosa, para que te arome el andar...