lunes, 24 de agosto de 2009

Excixten_ Ze




La pululación, el gentío, el distraído trajín, las hebras desmembradas de los trajes, los rebuznos de las broncas, las manchas de humo, el olor del pescado fritándose, el café que humea en una taza, los retazos arrugados de las revistas, los colores de las cintas en los espejos de los taxis, las sinuosas líneas del traje de las muchachas, el duro cuero que sostiene las armas envainadas, las máscaras de los capiteles, las voces inaudibles de los coros, los motores, los parapentes, las angulares esquinas, las rectas avenidas, las semillas de naranja, las vides, las huestes macilentas, las caravanas lejanas, la anterior vida de los pobladores... la humanidad integra va camino a otra, mutando sobre la relación misteriosa de otro cielo estrellado. Hacia una forma anhelada de construcción que el devenir aún no ha establecido y que se sigue preguntando al oráculo. Busca una órbita nueva, un diseño más aproximado a lo que desea, un mundo más cercano al cielo, y menos a ésta nube de polvo, a éstos incendios, a estos gritos en la oscuridad.
El catálogo de formas en las que elige es interminable, las estructuras agotan sus variaciones y se rehacen, comienzan con el suburbio de las ciudades. Retículas sin fin en donde reproducirse y deshacerse una y otra vez….Hasta que cada diseño no haya encontrado su lugar, seguirá renaciendo. Mas en la hora que el siglo del dragón termine y comience el del delfín, una realidad nueva inundará el orbe.
El Rey Chamán ha dicho que las alas que ha visto volar son los paraguas desconfiados bajo los cuales miles de párpados pesados bajan las miradas, gente que creyendo volar apenas alzaron del suelo.
¿Se equivoca el oráculo?, ¿El sueño del Ser es infiel a la verdad?... no necesariamente.
Quizás todo consista en saber qué palabras pronunciar, qué gestos realizar, qué orden elaborar, qué ritmo manifestar y hacerlo de ese modo en ese momento.
No obstante, es preciso que todo ocurra como por casualidad, sin darle demasiada importancia, sin la pretensión de estar realizando una operación decisiva, teniendo en cuenta que de un momento a otro todo puede cambiar: el tiempo y su relación, la vida y la muerte, la luz y la oscuridad, la luna y el sol, el hombre y la mujer, el instante y la eternidad.

1 comentario:

Gracias caminante...llévate una rosa, para que te arome el andar...